Categorías
Blog

«Cabo Norte en moto: al fin del mundo con los ContiRoadAttack 4» por Quique Arenas

8.600 km hasta Cabo Norte con los ContiRoadAttack 4

Cabo Norte es uno de esos destinos que figuran en la lista de sueños de cualquier motoviajero. Alcanzar el punto más septentrional de Europa, rodando entre paisajes salvajes y una climatología cambiante, es un reto que exige preparación… y unos neumáticos a la altura. En esta ocasión, nuestro colaborador Quique Arenas, director de la revista Motoviajeros, nos relata su regreso a Nordkapp, nada menos que con los ContiRoadAttack 4, el neumático hyper-touring de altas prestaciones de Continental que le ha acompañado en esta aventura única hasta el fin del mundo.

Historias de un viajero

Un viaje a Cabo Norte siempre es especial: no todos los días uno tiene la oportunidad de alcanzar el punto más septentrional del planeta al que es posible llegar por carretera. Nordkapp (latitud 71°10′21″N) está en la isla noruega de Magerøya. Más allá de los confines de Tuktoyaktuk (Canadá); más allá de Fairbanks (Alaska); incluso más al norte de la isla Vaigach, morada de los dioses árticos situada en el remoto archipiélago ruso de Nueva Zembla.

Rodar hasta la mítica “bola” supone aceptar un reto que conduce al mismísimo fin del mundo; por ello, la elección de los neumáticos resulta fundamental, pues se trata de un viaje exigente, con largas distancias, en el que podemos enfrentarnos a una climatología adversa y cambiante. La decisión de montar los ContiRoadAttack 4 en la nueva Morbidelli T1002VX ha sido un completo acierto.

En un viaje de estas características, el neumático ha de ser un compuesto resistente y duradero, con buen agarre, que nos dé confianza en mojado y tenga capacidad para alcanzar un calentamiento rápido en condiciones frías. Además, salvo contadas excepciones, iremos por asfalto y, en muchos casos, con la moto prácticamente vertical (por ello es importante un vulcanizado que garantice la perdurabilidad de la banda central de rodadura, para minimizar los efectos del temido escalón). Si además queremos contar con un área tipo slick que nos brinde mayor superficie y adherencia en pasos por curva, nada mejor que los ContiRoadAttack 4, el neumático hyper-touring de altas prestaciones de Continental.

Pura fantasía

Se dice que en la vida de un motorista solo hay algo mejor que hacer un viaje a Cabo Norte: hacer dos. Mi primera vez llegó en 2018, con Travelbike. Fue increíble, y supe que tarde o temprano volvería. Ha sido en 2025 cuando he podido regresar para rodar por unos lugares que nunca dejan de sorprender por su inconmensurable majestuosidad.

Una de las particularidades que le otorgan un carácter único a este viaje es que cada jornada es mejor que la anterior. Así un día tras otro en una sucesión de suspiros y sonrisas que culminan con la llegada a la icónica esfera dedicada al globo terráqueo. Algo así no ocurre prácticamente nunca: siempre hay etapas monótonas, de trámite, tediosas transiciones. En este viaje a Cabo Norte, no. Todo es una suma de arrebatos. Pura fantasía, que diría Rafa Ausejo, alma mater de Ruralka on Road.

La península de Escandinavia nos regala un álbum de fotos absolutamente incomparable. Es una de las más extensas de Europa, y sus fiordos, ríos y montañas –pero también paisajes de tundra y taiga- hacen que cualquier otro lugar del viejo continente no resista la comparación. Si a ello le unimos la herencia vikinga, el sol de medianoche y la posibilidad de contemplar auroras boreales (visibles de septiembre a marzo), entenderemos por qué se ha convertido en los últimos años en uno de los lugares de peregrinación más deseados y venerados por parte de los motoviajeros de medio mundo. Pero ojo, no todo es romanticismo overlander: podemos encontrarnos mucha lluvia, mucho frío, mucha niebla… e incluso mucha nieve. Es parte del desafío.

En esta ocasión recurrimos a los servicios de Motobox, una empresa dedicada específicamente al transporte profesional de motocicletas por Europa, y el viaje dio comienzo en Gotemburgo (Suecia). ¿La razón? De este modo se aprovechan al máximo los días en destino, reduciendo además el desgaste de la moto y, por ende, de los neumáticos. Todos sabemos que cambiar zapatos en pleno viaje siempre representa una impredecible incomodidad. De esta forma no fue necesario: el odómetro registró 8.600 kilómetros en un total de 23 días. Más o menos el tiempo que necesitaríamos saliendo desde España, pero en este caso cambiando las aburridas autopistas de Francia y Alemania por tiempo y jornadas de calidad en Escandinavia. Los Conti hicieron su trabajo a la perfección y aún había margen para más.

La duración de los neumáticos es motivo de acalorados debates, sobre todo en redes sociales. Tan cierto y creíble es que alguien asevere que no llega a los 5.000 km, como quien afirma superar los 14.000. Como sabemos, depende de numerosos factores: empezando por el estilo de conducción, terminando por las características del asfalto y pasando por el tipo de moto, peso del conjunto, temperatura, una presión inadecuada de los neumáticos… En nuestro caso, lo habitual es llegar a los 12.000 km. Más o menos lo mismo que con los ContiTrailAttack 3 (otro estupendo candidato para una ruta de estas características) o los TKC 70, mi preferido para un uso mixto.


Relacionado: «Pirineos: más allá de las nubes con los ContiTrailAttack 3» por Quique Arenas


Una ruta de ensueño

Desde Gotemburgo, tomamos la E6 rumbo a Stavanger. Dejamos al norte Oslo y abandonamos la monotonía de la autopista repleta de autocaravanas y Teslas para adentrarnos en las angostas carreteras interiores de Agder, la región más al sur de Noruega. Pronto aparecen las primeras señales advirtiendo del peligro de alces. Y no son un farol. Parada y pernocta junto a un bucólico lago.

Importante: en Noruega, la acampada no solamente no está perseguida, sino que está protegida por ley. Se llama Allemannsretten (libre albedrío), y ampara el derecho a vagar libremente, garantizando el acceso universal a la naturaleza incluso en zonas extensas de titularidad privada. Eso sí, hay que mantener una distancia mínima de 150 metros con respecto de la propiedad habitada más cercana, y por supuesto respetar el medio ambiente y no dejar basura. Si optamos por montar la tienda en un camping, existen cientos ubicados en lugares idílicos, con diferentes tarifas y verdaderamente ideales para los motoristas. Teniendo en cuenta los precios de la hotelería nórdica, nuestro bolsillo lo agradecerá. Las cervicales no tanto, de acuerdo. Pero… esto ya es cuestión de cada viajero en función de presupuesto, prioridades y espíritu wanderlust. Otra opción es alternar acampada, hoteles y hytters, cabañas típicas que suelen representar una opción económica intermedia.

Comienza el espectáculo. En Stavanger es obligada la visita a Sverd i fjell, un monumento vikingo con tres gigantescas espadas de bronce ensartadas sobre un roquedo de la costa. Conmemora la batalla de Hafrsfjord del año 872, en la que el rey Harald Hårfagre unificó Noruega. A partir de este momento, todo es una acumulación de lugares de ensueño: Bergen, Flåm y la carretera de las Nieves (o en su defecto Lærdal, el túnel más largo del mundo con 24,5 km), la Atlantic Road con su trazado inverosímil, Geiranger, la celebérrima Trollstigen, Trondheim, Navik, Tromsø, Honningsvåg … Si hay tiempo, por supuesto se hace obligado incursionar en las Lofoten, considerado el archipiélago más hermoso del mundo. Muy cerca, Senja, remota y olvidada, rivaliza en belleza con sus islas vecinas.

A lo largo de este apasionante camino vivirás una espiral de emociones. Te adentrarás en el vientre de la indómita naturaleza salvaje escandinava, y los renos formarán parte habitual de la escenografía una vez superado el Círculo Polar Ártico. También las ballenas. Y los secaderos de bacalao. Y las puestas de sol que no terminan de morir nunca, porque en estas latitudes el astro rey se olvida de dormir, regalándonos días sin noches, casi un cheque en blanco para los devorakilómetros más osados.

Llegar hasta los confines del mundo representa un cúmulo de sensaciones profundas. Este viaje es diferente a los demás, quien lo ha realizado lo sabe: es un recordatorio constante del humilde lugar que ocupamos dentro del gran esquema del que formamos parte. Todo lo que nos rodea es grandioso. Tal vez por eso el diario de viaje se llena solo. Podríamos narrar mil y una sensaciones. Pero lo importante es que lo vivas tú. En primera persona. Que lo anheles y llegue el día en que puedas poner rumbo norte. Rumbo a Cabo Norte, el viaje soñado.


Relacionado: «14.000 KM de satisfacciones con los TKC 70 Rocks» por Quique Arenas


 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


Le recordamos que para escribir comentarios en conti-moto-blog.es debe aceptar nuestro Aviso Legal y nuestra Política de Privacidad

Información básica sobre Protección de Datos

  • Responsable: Continental tires España S.L.U.
  • Finalidad: Gestionar el envío de información y promociones interesantes relacionadas con la empresa y su actividad.
  • Legitimación: Consentimiento del interesado. Puedes revocar tu consentimiento en cualquier momento desde los emails que recibirás o escribiéndonos a newsletter@conti-moto-blog.es.
  • Destinatarios: Tus datos estarán almacenados por Mailchimp (The Rocket Science Group LLC), nuestro proveedor de email marketing. Es una de las empresas más seguras y reconocidas a nivel global, acogidos a Privacy Shield.
  • Derechos: Puedes acceder, rectificar y suprimir los datos, así entre otros, como se explica en la información adicional

Puedes ver más información en nuestra Política de Privacidad

Salir de la versión móvil