Consejos interesantes sobre la frenada
Dentro de las prestaciones de una moto, nos solemos fijar en su potencia, su aceleración y su velocidad. Sin embargo, también deberíamos recordar sus prestaciones en el momento de la frenada, valorando su equipamiento en este aspecto: si cuenta con frenos de tambor o disco, uno o dos discos en la rueda delantera, su diámetro, pinzas de anclaje radial o no, con 2 o más pistones… En definitiva, el proceso de detención y control de la moto es crucial. No se trata de estar continuamente en esa posición, pero sí sobre todo cuando nos acercamos a una zona potencialmente peligrosa.
Posteriormente, hay que tener en cuenta otros aspectos del mantenimiento, como las llantas en buen estado y, por supuesto, los neumáticos con presiones correctas y en buen estado.
A partir de aquí, a la hora de frenar, hay una serie de consejos que debes seguir para detener o ralentizar tu moto de la manera más eficaz y segura.
Distancias de seguridad. No es una cuestión de la frenada como tal, pero sí es clave a la hora de realizar una conducción segura que ayuda a evitar una colisión frenando con tiempo y espacio. Gracias a respetar las distancias de seguridad, conseguiremos anticiparnos a movimientos inadecuados y repentinos de otros vehículos.
Pastillas, discos y pinzas de freno nuevas. Cuando cambias de pastillas de freno, discos o cualquier otro componente del equipo, debes tener en cuenta que al principio puede ser que la frenada no sea todo lo eficaz que después de unos kilómetros. Los pistones empujan diferentes piezas móviles y las pastillas se van amoldando para entrar en contacto con toda su superficie sobre el disco. Sé paciente en estos primeros metros. Algo similar ocurre con los neumáticos nuevos, aunque en el caso de Continental, se utiliza una capa microrrugosa denominada TractionSkin que evita esos deslizamientos en los primeros metros de rodaje.
Tipo de asfalto y pintura. Debes tener en cuenta que, según el tipo y el estado del asfalto, la eficacia en el momento de la frenada es diferente. Además, hay que contar con las condiciones climáticas (frío, lluvia, hielo…), que afectan significativamente en las distancias de frenado. También la pintura de señalización horizontal sobre el suelo suele ser bastante más deslizante, por lo que es mejor evitar pasar por ella y frenar.
Freno motor. Además de accionar el equipo de frenos de la moto, debemos contar con el freno motor, es decir, utilizar la fuerza retenedora del motor cuando reducimos marchas y que ayuda a reducir la velocidad. De esta manera, podemos adecuar o anticipar una reducción de la velocidad según las circunstancias sin necesidad de accionar el freno mecánico.
¿Cómo frenar en moto?
Lo primero, es importante estar preparado para poder frenar lo antes posible, por lo que es recomendable tener la mano o los dedos sobre la maneta o manetas del freno y el pie preparado para accionar el pedal del freno trasero. De esta manera, no tardaremos mucho en accionar los frenos, unas décimas de segundo que pueden ser capitales a la hora de evitar una colisión.
Otra de las claves a la hora de frenar en moto es que el freno delantero es el más importante porque es el que detiene la moto con más rotundidad. Así que, normalmente utiliza el freno delantero. Pero también el trasero, que ayuda a estabilizar todo el conjunto de la moto. Dicho esto, lo mejor y como normal habitual, es repartir la fuerza de frenada en un 80% delante y un 20% detrás. Si además aplicamos esta fuerza un poco antes atrás, conseguimos que el conjunto de la moto baje el centro de gravedad y ayude a que los dos ejes no pierdan tracción.
En el caso de los scooter y las motos custom, debido al reparto de pesos y las diferentes cotas, es recomendable cambiar ligeramente esta proporción, intentando hacer ligeramente mayor presión en el neumático trasero que en el delantero.
Cuando tenemos superficie mojada o húmeda, las frenadas son irremediablemente más largas en espacio, por lo que necesitamos también más tiempo para frenar en el espacio deseado. Así pues, hay que adelantarse mucho más a las posibles detenciones y aumentar las distancias de seguridad. Además, el riesgo de pérdida de adherencia es mayor. En este caso y para evitarlo, el reparto de frenada es ligeramente más equilibrado para no forzar tanto el tren delantero dejándolo en un 50-50 más o menos.
También es muy habitual advertir de una norma: no frenar en plena curva. En caso de necesitarlo, sólo debe hacerse de manera muy suave, porque puede producir pérdida de adherencia con mayor facilidad o desestabilizar el conjunto de la moto. Ahora ya hay avanzados sistemas de ABS inteligentes que actúan en plena curva.
De hecho, uno de los sistemas que más han ayudado a mejorar la seguridad de la moto en las últimas décadas de manera definitiva es el ABS, el antibloqueo de frenos, que evita que las ruedas se bloqueen a la hora de frenar. Recuerda que Continental es una de las empresas punteras en el desarrollo y la fabricación de sistemas de ABS. Hoy en día todas las motos de más de 125 cc deben llevar ABS de serie. En el caso de las motos 125, deben llevar ABS o un sistema de frenada combinada. Por tanto, las mejoras en este aspecto son muy importantes para la seguridad activa de la moto. En el caso de comprar motos más antiguas, ten en cuenta que tener o no ABS puede convertirse en un factor clave a la hora de adquirirla.
En conducción off-road, hay que tener en cuenta que el freno trasero cobra gran importancia y que el bloqueo del eje trasero se hace imprescindible. En este caso, el ABS debe desconectarse.
¡Esperamos que con este repaso puedas tener mejores armas para frenar en moto con mayor eficacia y seguridad!